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| Craig Biggio y José Altuve se estrecharon la mano |
El camarero rompió el récord de Craig Biggio de hits en una campaña con su 211° del año, un sencillo al centro en su cuarto turno en la séptima entrada, en derrota versus los Indios de Cleveland por 4-2.
“Cuando era niño crecí viendo a Craig Biggio y cientos de jugadores más, pero Biggio era el segunda base”, dijo Altuve a los medios de comunicación después del encuentro. “Él jugaba para los Astros como estoy yo ahora mismo. Él consiguió el récord, obtuvo 3.000 hits. Él va a estar en el Salón de la Fama más pronto que tarde. Para mí, romper este récord es muy importante”.
Altuve, quien no había podido conseguir imparables en sus primeros dos turnos, empató la marca con un doble por la raya del jardín izquierdo en el quinto, lo que generó la algarabía de los 18.381 asistentes, quienes ovacionaron de pie durante un minuto al criollo, antes de que este se quitara el casco como gesto de agradecimiento.
Después de la quinta entrada, el venezolano se acercó a Biggio, quien estaba sentado con Nolan Ryan a la derecha detrás del plato, y le estrechó la mano. “Él me dijo que me felicitaba y que mantuviera mi swing”, agregó el criollo. “Esas dos palabras significan mucho para mí. Viniendo de él, dicen mucho, demasiado; además, estuvo viendo el partido”.
El maracayero aseguró que Biggio había salido temprano durante la práctica para conversar con él y le dijo: “Ok, dos más, vamos por él”, gesto que lo inspiró y motivó para que el día fuera muy especial. Altuve se mantiene como líder bate, y está al frente de los hits conectados y bases robadas.
El camarero alcanzó a Andrés Galarraga (1996) y Miguel Cabrera (2012) con 64 juegos multihits y, sin contar la jornada de anoche, se ubicó a cinco imparables del récord para un criollo en poder de Magglio Ordóñez (216).
Otros criollos dejaron huella en sus equipos
La hazaña de José Altuve al fijar un nuevo récord para una franquicia en las Grandes Ligas obligó a desempolvar algunos libros y a revisar minuciosamente la internet en busca de otras marcas con sello criollo en los diferentes conjuntos de las mayores.
A pesar de las monstruosas temporadas de Johan Santana, Miguel Cabrera, Félix Hernández, e incluso Luis Aparicio, alcanzar los mejores topes en una temporada es una hazaña verdaderamente titánica.
El factor histórico de la franquicia, por donde han pasado verdaderos inmortales del beisbol, el tema salud y la consistencia, son algunas de las condiciones que deben darse para quebrar récord alguno.
Andrés Galarraga fijó la marca de más empujadas en una temporada para un jugador de los Rockies de Colorado con 150 en 1996.
Félix Hernández posee la mejor efectividad en una zafra para un lanzador de los Marineros de Seattle con 2.27, lograda en 2010. Este año acumula 2.14, pudiera superar su propia marca; además, el “Rey” es quien más blanqueos registra, con cinco en 2012.
Miguel Cabrera se codea con Ty Cobb y Hank Greenberg, pero aún no alcanza ningún tope para los Tigres en una zafra. Solo es dueño del registro de más boletos intencionales, cuando en 2010 recibió 32. Igualmente, ostenta el mismo récord con los Marlins con 27 pasaportes intencionales en 2006. Nadie ha conectado más dobles en Miami que Miggy con 50 ese mismo año, en el que terminó con .339 de AVG, el segundo mejor promedio en una temporada en la historia del club. /Manuel Bitar (Líder)
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